ESTAR, DEJAR, ESTAR de Luisa Murillo y Rosario Ateaga

En la calle Ana Luisa Prats -Santiago de Chile- viven desde 1983 las hermanas Tala y Chepa. Las dos, de alrededor 70 años, dejarán el hogar que las abrigó casi más de dos décadas debido a la venta de la casa y la llegada de una nueva propietaria. Su estancia, marcada por el fallecimiento de una hermana ocho años atrás, sirvió como escenario para su familia, acumulando objetos, fotografías, plantas y botellas vacías.

Esta narración es el guión de un hecho real, las artistas Luisa Murillo y Rosario Ateaga registraron la experiencia en ESTAR, DEJAR, ESTAR tres verbos que establecen una narrativa visual en tres episodios. El Muro será el depósito de cada etapa, compuesta por los vestigios de los personajes, creando en conjunto una geografía visual de la ausencia.

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